Hay algo extrañamente familiar en Daniel Grigori.
Misterioso y distante, llama la atención de Luce Price en el preciso instante en que puso los ojos en él durante su primer día en el internado Sword & Cross en la calurosa ciudad de Savannah, Georgia. Es una luz brillante en un lugar donde los móviles están prohibidos, los demás estudiantes son todos unos pringaos y las cámaras de seguridad vigilan cada movimiento.
A pesar de que Daniel no quiere tener nada que ver con Luce —y de que se lo ha dejado muy clarito—, no puede dejarlo estar. Atraída por él como la polilla a la llama, tiene que descubrir cuál es el secreto que tan desesperadamente guarda Daniel… aunque eso acabe con su vida.
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